Con el objetivo de reconocer y validar a los pueblos originarios mediante un Modelo de Salud Intercultural, respetando sus creencias e incorporando prácticas ancestrales de sanación, se llevó a cabo una capacitación dirigida a  la comunidad funcionaria para interiorizarse sobre el decreto 21 normativa publicada en el Diario Oficial el 29 de diciembre de 2023 que obliga a los prestadores institucionales públicos a garantizar este derecho, mediante un diseño e implementación del modelo con  la participación de las comunidades indígenas de su área de influencia.  

La inducción estuvo a cargo de Roxane Torres, Referente del Programa de Salud y Pueblos indígenas de la Seremia de Salud Antofagasta. «Lo importante es que este decreto busca el rescate y la visibilización de la medicina ancestral, además de reforzar la Ley de Derechos y Deberes del Paciente, particularmente el artículo 7, que establece que los establecimientos de salud deben brindar atención con pertinencia cultural. En el fondo, se trata de restablecer la confianza entre las comunidades indígenas y los servicios de salud, asegurando que su cultura y medicina ancestral sean respetadas y reconocidas en los distintos establecimientos”, aseguró. 

La profesional, agregó que «el objetivo del Modelo de Salud Intercultural no es reemplazar la medicina occidental, sino promover una dualidad en la atención, integrando la medicina ancestral para abordar, por ejemplo, los efectos adversos que genera el tratamiento oncológico convencional, como las radioterapias”, señaló la referente. 

DATOS  

«Según datos del Censo 2017 del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el 14,1% de la población de la región de Antofagasta se considera perteneciente a un pueblo indígena. En cuanto a las causas de muerte en esta población, se observan diferencias importantes entre zonas rurales y urbanas. En áreas rurales, las enfermedades respiratorias representan la principal causa de muerte (26,6%), seguidas por las enfermedades oncológicas con un 16%. En cambio, en las zonas urbanas, el cáncer ocupa el primer lugar como causa de fallecimiento en la población indígena, con un 25,5%”. 

“Esta realidad evidencia la alta frecuencia de enfermedades oncológicas entre personas indígenas, lo que refuerza la importancia de que el Centro Oncológico del Norte se capacite en atención con pertinencia cultural, considerando las barreras históricas de acceso al sistema de salud que han enfrentado las comunidades originarias, especialmente en contextos rurales.», expresó la profesional de la Seremia de Salud.  

La referente del  Programa Especial de Salud y Pueblos Indígenas del CON, Angela Morales, hizo hincapié en que “estamos en etapa de sensibilización de los funcionarios, respecto al modelo intercultural de salud, también se conformó el equipo gestor que tendrá como función socializar la normativa, la creación de un protocolo e incorporar la pregunta de pertenencia de los pueblos indígenas en todos las áreas clínicas donde ingresen pacientes”, expresó.  

PREGUNTA PERTENENCIA INDÍGENA  

¿Se considera perteneciente a un pueblo indígena u originario? Es la pregunta que deberán hacer todos los funcionarios del sistema de salud público, en el momento de llenado de ficha, encuesta, formulario del sistema de registro informático o administrativo, para cumplir con la normativa. 

SANADORES Y FACILITADORES INTERCULTURALES 

En el marco de la medicina ancestral, actualmente el Servicio de Salud cuenta con un convenio con la Asociación de Sanadores Lickan Hampitur, quienes realizan atenciones a usuarios y actividades de difusión sobre medicina ancestral. Estas prestaciones se desarrollan principalmente en la provincia de El Loa. Además, existen facilitadores interculturales en la red asistencial ubicados en el Hospital Regional de Antofagasta, en Calama y San Pedro de Atacama, quienes actúan como puente entre las comunidades indígenas y los establecimientos de salud. Su rol es clave para la creación e implementación del Modelo de Salud Intercultural. 

El Centro Oncológico del Norte continuará trabajando para implementar el Modelo de Salud Intercultural de manera efectiva. Se espera que esta iniciativa mejore la atención y el cuidado de los pacientes indígenas, y contribuya a reducir las brechas en salud en la región.